sábado, 16 de marzo de 2013

En Chávez se desborda el hombre





MURIÓ CHÁVEZ
                                                                                                                  Por Manuel da Roura.

  Es difícil para una persona de mi edad explicar qué pienso de Chávez y qué me pareció el hombre. No, no es fácil y sin embargo, por aquí,  anda un pueblo enardecido y triste...Por algo será.
  Desde principios del año 1931 en la escuela, en la casa de mi padre, (quien había  trabajado en Cuba y en USA) y en mi larguísimo peregrinaje, que en cierto modo aún  dura, he venido conociendo, experimentando, leído y, en parte vivido, en países cuyos gobernantes, como es natural, se distinguieron por lo que hicieron o por lo que dejaron de hacer.
  Supe de historias que en general se consideraron buenas y de otras historias consideradas malas. Muchas veces, unas y otras, pecaron de subjetivas y de parcializadas. Las opiniones no siempre son creíbles.
  Nuestras simpatías, antipatías y conveniencias pueden convertir un santo en un demonio y viceversa. Franco, para algunos emigrados que por aquí encuentro, está en el cielo. Para otros, en cambio, se está quemando en la quinta paila del infierno.
  El Hugo Chávez, este presidente venezolano que acaba de morir, es para Venezuela un Dios y para el resto del mundo un auténtico fenómeno, no sólo político sino humano. Chávez rompe todos los esquemas del dirigente típico, por excelente que haya sido. Ya no se trata de crecimientos económicos de paz y tranquilidad, así como del acceso de todos los ciudadanos, sin excepción, a los servicios médicos por costosos que fueren, a la enseñanza en todas sus ramas y en todas sus categorías, tanto para el hijo del rico como para el hijo del obrero. No, no se trata sólo de eso. No se trata de un igualitarismo mecánico, rígido y sin vida. En el chavismo hay más que eso, mucho más que eso. En el chavismo hay alma, hay esa cosa que se les hace difícil explicar a los teólogos, pero que está ahí y que el pueblo refleja en todo momento en sus manifestaciones, en sus gritos y ahora en su llanto.
  El pueblo venezolano se valorizó, se agigantó con Chávez y, gracias a  él, supo que era alguien, que, por fin, pasaba ser dueño de su cuerpo, de su alma y de su destino.
  Hugo Chávez no se limitó a promover y aplicar leyes. Chávez introduce en el quehacer nacional un elemento antes desconocido: la dignificación del hombre. Dignificación como ser humano y dignificación en su relación con los demás.
  Ahora el gentilicio venezolano honra. No es sólo una simple referencia, es una categoría, es un título, es un honor.
  Hugo Chávez enfrentó a todos los poderes fácticos nacionales e internacionales y les torció el brazo. Desde una iglesia moribunda, que ya no representa nada, hasta el imperialismo ladrón, siempre en busca de botín, todos ellos tuvieron y tienen que recular ante este pueblo dignificado y fuerte.
  En Chávez se desborda el hombre y aparece el sentimiento y la valentía.
  Nadie jamás se atrevió, como Chávez lo hizo, a enfrentar públicamente al coloso del norte: Cuando, en la Asamblea General de la ONU, el presidente Bush (hijo) finalizó su discurso, como siempre lleno de amenazas y de imposiciones, se oyó  la voz del presidente Chávez: "¡Aquí huele a azufre!". Promoviendo, así, una estruendosa y sentida carcajada por parte de los representantes de todos los países del mundo... Eso lo hizo Chávez, y ningún otro se atrevió a tanto... Ese fue el presidente Chávez. Ese era Hugo Chávez.
  Aquí, en Venezuela, la participación política de todo el pueblo es profunda y constante. Aquí todo el pueblo se siente, de una u otra manera, protagonista de su propia historia. Aquí todo el mundo sabe de política, sabe de su país, sabe de su pasado y sabe de las posibilidades que el presente y el futuro ofrecen para hacer de Venezuela una patria grande y respetable.
  En muchos otros países del mundo se hace obligante encontrar un Chávez, crear un Chávez, hacer un Chávez. Aquí dio resultado; aquí Chávez catalizó, para bien, todo el sentimiento libertario de un pueblo.
  El ejemplo de Venezuela, y a esto queríamos llegar, debe servir para despertar de una buena vez a todos esos pueblos mediterráneos que, como el español, padecen de una crisis profunda e interminable. Ya no son válidas todas esas grandes manifestaciones de calle y plaza proclamando indignaciones, reales pero ineficaces.
  Es necesario que cada quien fuerce sus posibilidades, ¡qué las hay!, y termine de una puñetera vez tanta pobreza, tanto desahucio, tanta miseria, tanto rey, tanta Cayetana, preñada o no y tanta estupidez. 

  (Manuel da Roura)


domingo, 10 de marzo de 2013

hace el adiós llevadero.




Abrigaba el hombre un sueño
y en aquel sueño abrazaba
la causa que le abrasaba
el corazón como leño
crepitante en alcazaba.

Tenía ardiente el empeño,
tenía el alma empeñada,
tenía puño y espada
y el sentimiento risueño
transferido a su mirada.

De cuanto Chávez tenía
todo lo invirtió en sendero,
pues su valor verdadero
acrecentó plusvalía
abriendo surco al granero…,

y el granero en alcancía
hace el adiós llevadero.

(Rioderradeiro)



sábado, 9 de marzo de 2013

Dime tú, Chávez, manera

Foto


¿Por qué partió el Comandante
Y en su marchar peregrino
Fue conquistando el camino
Con la verdad por delante?

¿Por qué en la patria del cielo
Sonó el aplauso bendito?
¿Por qué un arcángel contrito
Se aprestó a mirar al suelo?

¿Por qué se olvidó el consuelo
De mi dolor infinito?
¿Por qué será que en la tierra
Se encubre el llanto de luto?

¿Por qué un poder absoluto
Fabrica el hambre y la guerra?
Dime tú, Chávez, manera
De extirpar del hombre al bruto.

(Rioderradeiro)



con el laurel de su espada.




El niño de Sabaneta
agarró firme el arado,
dejó su campo sembrado,
ha rebasado su meta,
la vida ya lo ha colmado.

Quien le ha visto adolescente,
quien le siguió en mocedad,
quien comprobó su verdad
sabe que fue voluntad:
un hombre bueno y valiente.


Forjó Barinas probada
lealtad en tu persona;
contigo, Chávez, atrona
tanta firmeza expresada,
que el gran Bolívar corona

con el laurel de su espada.

(Rioderradeiro)




viernes, 8 de marzo de 2013

Vibre tu espada en mi hombro,


Donde la gloria te espera
Conduciré mi caballo,
Todo el empeño de un rayo
Para alcanzar tu frontera.

No me amilana el desmayo,
No cejaré en mi carrera,
Tu paso vivo aligera,
Tomo tu ejemplo, y me callo...

Pues, si en mi mente te nombro,
Te invoco fuerte y me asombro
Por si despierto algún fallo,

Verme vencido y lacayo,
Contrafigura y escombro,
Envilecido en cipayo.

Vibre tu espada en mi hombro,
Chávez, amigo, tocayo …


(Rioderradeiro)



jueves, 7 de marzo de 2013

.- LUCERO CHÁVEZ DEL “HOY”.



Pongo en tu rostro mi nombre
y con mi nombre quien soy
-uno de tantos-, estoy
vinculado al hombre,
y si él partiere, me voy
donde mañana relumbre
lucero Chávez del “hoy”.

(Rioderradeiro)

miércoles, 6 de marzo de 2013

A H.R. CHÁVEZ FRÍAS (in memoriam) .- Ver en tu espejo el sendero.


En vida no se ablandaba
este valiente soldado,
la parca lo ha agigantado
cuando más firme avanzaba.

Soldado –he dicho-, y cimero,
un león contra las fieras,
cordero en buenas maneras,
de su perfil prisionero.

Seguirás siempre presente,
Chávez, fecundo y sincero,
y tu valor verdadero,

que la grandeza prefiere,
fructificará de frente;
pues Venezuela requiere,

para ejemplo de su gente,
ver en tu espejo el sendero.


(Rioderradeiro)

EL FILO: Los que mueren por la vida no pueden llamarse muer...

EL FILO: Los que mueren por la vida no pueden llamarse muer...:   El vicepresidente venezolano Nicolás Maduro dio la dolorosa noticia: a las 4:25 minutos de esta tarde falleció en el Hospital Militar...